Se le llama contaminación cruzada al paso de organismos nocivos para la salud de un alimento a otro, estos agentes infecciosos se encuentran en los productos crudos y son eliminados por medio de la cocción o un buen lavado.
También las personas encargadas de elaborar la comida pueden infectarla, por eso es que quienes sufren de diarreas no deben cocinar para otros y la higiene de las manos es importantísima.
Contaminación directa: Sucede cuando un alimento contaminado infecta a uno que no lo está debido al contacto entre ambos, ocurre cuando se mezclan productos cocidos y crudos ya sea en el refrigerador, en la preparación de los mismos o en los platos listos para consumo.
Contaminación indirecta: Acontece cuando se trasmiten los contaminantes por medio de las manos, utensilios, equipos de cocina, mesadas, tablas de cortar, etc. Razón por la cual la higiene de los mismos luego de haber estado en contacto con alimentos crudos es indispensable.
RECOMENDACIONES:
-En el refrigerador, ubicar los alimentos crudos en la parte inferior del mismo y aquellos listos para consumir en la porción superior.
- - No utilizar el mismo utensilio (cuchillo, cuchara, tabla, etc) para cortar o manipular alimentos crudos y cocidos. Por ejemplo: cortar la lechuga previamente bien lavada con un cuchillo y después usar otra superficie, así como otro utensilio para cortar el pan. Se debe tener mucho cuidado cuando manipulamos carne cruda.
-Lavarse las manos siempre antes de preparar la comida y cada vez que manipulamos un alimento.
-Higienizar muy bien las verduras crudas, sobre todo, si vamos a preparar ensaladas y consumirlas en su estado natural, ya que pueden transmitir sus pequeñas bacterias a otros alimentos sanos que se incluyen en la ensalada, como huevos recién hervidos, pollo cocido, quesos, atún en lata u otros.
-Higienizar muy bien las verduras crudas, sobre todo, si vamos a preparar ensaladas y consumirlas en su estado natural, ya que pueden transmitir sus pequeñas bacterias a otros alimentos sanos que se incluyen en la ensalada, como huevos recién hervidos, pollo cocido, quesos, atún en lata u otros.
-Lavar, incluso, la cáscara del a fruta que vayamos a desechar, ya que aunque pelemos una naranja, su cáscara puede transmitir microorganismos a la pulpa que después comeremos.
Con éstos sencillos consejos y recordando que nunca debemos mezclar alimentos crudos con cocidos o limpios y asimismo utensilios que tocaron alimentos sucios o crudos para preparar otro tipo de alimentos inocuos, podemos prevenir la contaminación cruzada y evitar muchas enfermedades transmitidas por alimentos.